Para trabajar la parte superior del cuerpo, fortalecer los brazos y tener buena postura, las lagartijas son la solución ideal.
« ¿Yo, hacer lagartijas? ¡Imposible, no tengo fuerza en las brazos! » Esta frase, ya la escuchaste o hasta la repetiste. Lo malo es que este ejercicio es tu mejor aliado para afinar y esculpir la silueta. Así que no podemos prescindir de él ya que es completo y muy eficaz.
Las lagartijas sí duelen pero son una excelente solución para esculpir los hombros, los brazos y también el vientre. Presentan muchos beneficios y cualquiera las pueden hacer. Por ejemplo, en caso de subida de peso, los brazos tienen tendencia a almacenar grasas y la piel empieza a colgar. Muy antiestético, estamos de acuerdo. ¿La solución para reafirmar los brazos? ¡Las lagartijas!
Fácilmente realizables (en cualquier lado y en cualquier momento), no necesitan material específico ya que hasta sus variantes requieren sólo una pared o una silla.
¿Cuáles son los diferentes tipos de lagartijas?
Todas odiamos hacer este ejercicio. Pero más allá de reafirmar y fortalecer los brazos, también sirven para levantar y reafirmar el pecho. ¿Muy interesante, verdad? Pero si esto todavía no te da ganas de efectuarlo, es importante que sepas que existen varios tipos de lagartijas cuando se nos dificulta realizar las básicas.
De pared, de silla o de rodillas, aquí te damos algunos consejos para permitirte hacer este ejercicio sin dificultad.
Las lagartijas de pared
Son ideales si te cuesta trabajo hacer lagartijas clásicas ya que te permiten evitar soportar todo el peso de tu cuerpo.
¿Cómo hacerlas? Ante todo, calienta bien las muñecas, los brazos y los hombros.
Coloca tus manos en una pared, los brazos separados del ancho de tus hombros. Flexiona los brazos hacia el muro cuidando de siempre guardar los codos hacia abajo.
Haz 2 series de 15 repeticiones, 2 o 3 veces por semana.
Las lagartijas de silla
Truco para este ejercicio: no lo hagas con una silla de oficina que tiene ruedas, para no resbalarte.
¿Cómo hacerlas?
Coloca las manos de cada lado de la silla, con la espalda recta. Extiende tus piernas hacia atrás con los pies juntos, el busto hacia adelante y los abdominal fuertes. Inhala flexionando los brazos y extiéndelos, sin arquear la espalda.
Haz 3 series de 12 repeticiones.
Las lagartijas de rodilla
Última alternativa antes de hacer lagartijas de suelo y en plancha: las lagartijas de rodillas permiten avanzar progresiva y suavemente.
¿Cómo hacerlas?
En un tapete, las manos alienadas con tus hombros y las rodillas alineadas con tus caderas, sólo ven a flexionar el brazo inhalando y empujar exhalando. Si te es muy difícil al principio, lleva las manos hacia atrás y continúa de cuatro puntos.
Cuidado con no arquear la espalda y piensa en mantener los abdominales fuertes.
Haz 3 series de 15 repeticiones, soltando glúteos y talones entre cada serie.
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